Con seguridad habrá oído hablar de la enfermedad denominada Circovirosis Porcina. Por su impacto mundial negativo en la salud y mortalidad de las piaras, así como en la economía de las ganaderías, merece unas palabras. Descubierta en la década de los 90’s, se ha estimado que esta enfermedad ha acarreado unas pérdidas de entre 600-900 millones de euros anuales en Europa. No es una broma. Además, la estimación sobre su morbilidad oscila entre el 4 y el 30% de los animales; la mortalidad, oscila entre el 70-80% de los cerdos damnificados por la enfermedad. El temido PCV2, las siglas en inglés del Circovirus Porcino Tipo 2, es el principal causante de la enfermedad.
Por una lado, la vacunación ha mostrado ser la mejor forma de combatirlo, y por otro, Ingelvac CircoFLEX®, se ha consolidado como el medicamento veterinario en formato vacuna más exitoso de todos los tiempos. Este juicio de valor se sustenta en las estadísticas del volumen de ventas, y su elección por parte de los ganaderos, que han llevado a Ingelvac CircoFLEX® a proteger más de 1.500 millones de cerdos a nivel mundial.
Las más prestigiosas publicaciones profesionales y técnicas del sector lo han elogiado, al igual que en los simposios de expertos. Sus antivirales son el antídoto más contundente contra el virus, reduciendo considerablemente la mortalidad, la pérdida de peso, y los traumas en los tejidos linfoides. También se ha demostrado la reducción de la excreción nasal de PCV2, de su carga viral en sangre y tejidos linfoides, y de la duración de la propia viremia. Para terminar, ¡una gran noticia! La aprobación, por parte de la Comisión Europea (CE), del uso de Ingelvac CircoFLEX® en cerdas durante la gestación y lactancia.
Composición:
Cada dosis (1 ml) contiene:
- Sustancia activa: Proteína ORF2 de circovirus porcino Tipo 2: PR* 1,0–3,75 *Potencia Relativa (test ELISA) por comparación con una vacuna de referencia
- Adyuvante: Carbómero 1 mg
