Empapadores para perros

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Los empapadores para perros en nuestra casa

Los cachorros de perro no controlan bien sus esfínteres hasta cierta edad. Un poco como los bebés humanos, que necesitamos pañales hasta que controlamos bien las ganas de ir al servicio.

El caso es que los perros tardan poco en aprender y el uso de pañales en cachorros no es buena idea. Muy posiblemente se los arrancarían a mordiscos jugando. La mejor forma de educar a un cachorro a hacer pis fuera de casa es con el buen uso de los empapadores para perros.

No son exactamente iguales que los que se venden en farmacias para humanos. Suelen tener más resistencia, teniendo en cuenta las uñas pequeñas y afiladas de los cachorros. También suelen tener un poco más de capacidad de absorción, aunque en eso se parecen más.

Los tienes de distintos tamaños, perfumados y con sustancias para captar los olores.

El buen uso de los empapadores para perros

Unas pequeñas pinceladas del buen uso de los empapadores para perros. Debes colocarlo en una zona accesible para el perro, que los posibles olores molesten lo menos posible. En la bandeja de una ducha de aseo puede ser un buen lugar. Debes mantener abierta la puerta siempre que puedas, que el perro sepa que ahí puede hacer sus necesidades cuando lo necesite.

Para enseñar al cachorro recién llegado a usar el empapador, hay un truco. Los cachorros después de una buena siesta tienen ganas de hacer pis casi siempre. Observa cuando esté profundamente dormido un rato. Cuando se despierte, le llevas al empapador y esperas. Si hace pis, le felicitas mucho. Con un par de veces que lo hagas el cachorro ya irá solo al empapador.

Cuando tenga todas las vacunas y pueda salir a la calle, debes cortar un trozo de empapador y ponérselo para que lo huela en las zonas de la calle donde queremos que haga sus necesidades, ya sean jardines, parques, árboles… dejas el trozo de empapador y esperas. Si no haces nada, no pasa nada, sigue hasta que encuentres la siguiente zona. Así hasta que haga pis o caca. Le felicitas y le premias. Poco a poco lo dejará de hacer en casa y lo hará en la calle. En cuanto lo haga siempre que salga a la calle le vas quitando el empapador en casa. Nunca le castigues si encuentras sus necesidades en casa cuando llegas. El castigo solo va a agravar el posible problema.

A partir del cuarto o quinto mes, como mucho, los esfínteres de los perros ya han madurado y tienen la capacidad de esperar a que salgan a la calle. Recuerda, que nunca estén más de 8 horas sin que puedan hacer sus necesidades. Podrán aguantar las 8 horas, tú no detectaras problema alguno de salud, pero, muy posiblemente, será un perro con insuficiencia renal cuando se haga mayor.